Si estás leyendo esto, probablemente entiendas cómo se siente estar atrapado en un bucle de preocupaciones y nerviosismo que parece no tener salida.
La ansiedad puede sentirse como una sombra persistente, un compañero no deseado que oscurece tus días y nubla tus noches.
Pero también sabemos que detrás de esa sombra, hay luz; una luz que brilla más fuerte con el apoyo y la ayuda necesaria.
Debes entender la ansiedad, no como un enemigo, sino como una parte de ti que necesitaba atención y cuidado.
Buscar ayuda puede ser el paso más difícil, pero también el más liberador. Te invitamos a dar ese primer paso hoy. Solicita tu primera sesión gratuita y descubre cómo podemos ayudarte a salir del bucle de preocupaciones y nerviosismo.